La Organización Nacional de Jubilados y Pensionistas del Uruguay (ONAJPU) se presenta a las elecciones de próximo 28 de noviembre para integrar el directorio del BPS, encabezada por Sixto Amaro que fuera, por dos períodos, representante de los jubilados en ese organismo.
Precisamente Amaro entiende que el Banco de Previsión Social (BPS) enfrenta un panorama complejo, pero pone el énfasis en que es acto eleccionario por sí mismo es un acto constitucional, y se trata de la segunda elección nacional por su importancia.
Esa importancia está signada por distintos aspectos y, uno de ellos, es la participación de cerca de 2 millones de uruguayos. A ese número se llega con los más de 575 mil pasivos, un millón trescientos mil trabajadores y 250 mil empresarios.
Otro aspecto es el de la actividad social del Banco de Previsión Social que se encarga de las personas desde antes de nacer y continúa la asistencia una vez que fallece.
Por otra parte la participación social se resolvió por parte de la ciudadanía en la reforma constitucional de 1967, aunque la integración de los representantes de los distintos órdenes recién se pudo concretar en 1992.
Actualmente el cometido es acercar a la población seguridad y protección social, afirma Amaro que complementa el concepto explicando que actualmente el organismo atiende cerca de 750 mil pasividades.
Finalmente, con respecto al informe elaborado por la Comisión de Expertos en Seguridad Social y que elevó una propuesta con los votos a favor de los representantes del gobierno, Amaro expone la preocupación de la falta de diálogo que existió en la misma. Agrega que se obvió el planteamiento de las organizaciones sociales, algo que ya ocurrió con el diagnóstico que se realizó a los 90 días de haber comenzado los trabajos y que no fue compartida por ONAJPU y tampoco por los representantes del PIT-CNT.
