Sumario

Una fecha antes de que finalice la fase regular de todos contra todos, ya estamos dentro de los bolilleros del sorteo de los grupos del Mundial. Es la mejor noticia para lo que pudo ser.

Fue la más compleja competencia preliminar mundialista, por la situación que vivió la Selección en el transcurso de la misma.

Arrancó con victoria de locales ante Chile, en el epílogo mismo del partido. Al siguiente nos golearon en Ecuador y después ante Colombia en Barranquilla jugamos uno de los mejores encuentros.

Pero en el cierre de la doble fecha las primeras 4 de la 1ª ronda, Brasil nos derrotó aquí en Montevideo 2 a 0. Hasta ahí, 2 victorias dos derrotas.

Estábamos ya en pandemia y la imposibilidad de que los jugadores que estaban en Europa pudieran venir a la región y retornar a su Club de origen, llevó a cancelar   la 5ª. y 6ª jornada de las Clasificatorias Sudamericanas que debían celebrarse durante marzo y obligaron a una reestructuración profunda del cronograma.

Conmebol resolvió reiniciar el certamen a partir de la 7ª y 8ª fecha pautadas para los primeros días de junio. En tanto la jornadas 5 y 6 se debían recuperar en septiembre, octubre y noviembre, de 2021.

Uruguay sale de visita y logra dos empates ante Venezuela y Perú, 0 a 0 y 1 a 1. Luego se jugaron las jornadas pendientes y derrotamos aquí a Bolivia 4 a 2 y a Ecuador 1 a 0.

Después recibimos a Colombia en el Parque Central y fue empate a 0 y después empieza el largo túnel de los malos resultados.

Argentina nos derrota 3 a 0; Brasil 4 a 1; Argentina viene de visita y nos gana 1 a 0 y Bolivia nos hunde con un 3 a 0 en La Paz.

Esos resultados, que nos colocaron fuera de la zona de clasificación, solamente con 4 partidos ganados en 14 presentaciones, sumado a la mala Copa América que volvió a jugar Uruguay, llevaron a tomar decisiones a los miembros del Comité Ejecutivo.

Lo que parecía que no se podría llegar a concretar en ningún tiempo, sucedió. La A.U.F. relevó a Tabarez de su cargo al frente de la Selección.

Veníamos de recibir 11 goles en 4 partidos y solamente habíamos anotado una vez de tiro libre. Es cierto que el cambio de fechas o jornadas pudo habernos perjudicado, pero a todas las Selecciones se le alteraron sus planes.

La sensación que teníamos era que algo estaba quebrado dentro del grupo y no había sintonía entre el cuerpo técnico y los jugadores. La decisión del Ejecutivo fue arriesgada, pero con conocimiento de causas, decidió asumir riesgos.

La era Alonso

Jugó 3 partidos los ganó todos, algo que no sucedía con la Selección desde 2019. Sus dirigidos anotaron 6 goles y solamente recibieron 1.

El cambio de fisonomía de la Selección ha sido notorio.

Por 4ª vez consecutiva llegó a los mundiales masculinos absolutos, logra el cupo mundialista de manera directa y faltando una fecha. Hay méritos indiscutibles del entrenador y de la manera que viene ejecutando los recambios.

Incorporó jugadores que terminaron siendo decisivos, como Pellistri, Olivera. Otros que eran parte del plantel de Tabarez les otorgó una confianza que terminó siendo decisiva como el caso de Bentancur, Valverde y De Arrascaeta. Recuperó a Godin y Araujo fue titular. Rochet es el arquero que elige en los tres encuentros y cumple.

El cambio fue para ganar/ganar y los resultados están a la vista.

El partido

Fue lo contrario a lo esperado.

Si bien, Perú es una buena selección, trabajada por un entrenador que hace 7 años que la dirige y la ha dotado de algunas características que carecía, no pensábamos que Uruguay iba a sufrir los primeros 30 minutos, como sucedió.

La imagen que había dejado ante Venezuela y los buenos momentos ante Paraguay, nos dejaron la íntima convicción que la selección de Alonso, iba a arrollar al rival, quitarle el balón, cerrarle cualquier intento atacante y forzarlo de tal manera por la presión en la salida, que el gol que desnivelara a nuestro favor, llegaría temprano y traería tranquilidad.

Sin embargo la figura fue Rochet que a los 32´del primer tiempo ya llevaba tres atajadas ahogando el grito de gol de la bulliciosa barra peruana que colmo un sector de la América.  

Recién a los 35 minutos aflojó la tensión que había provocado el juego peruano, que incidió para que la selección Celeste, no lograra acomodarse en el partido, a pesar de la incansable y permanente búsqueda de los circuitos futbolísticos que intentaron una y otra vez Bentancur y Valverde, gestores de todos los balones que rotan e intentan jugarse criteriosamente.

El protagonista fue Perú, ejerció presión en la salida de Uruguay, obligó en reiteradas ocasiones al balón largo para sacarlo de la zona quemante.

Un remate desde distancia al arco a los 40´de Federico Valverde, forzó a  Galesse, para mandar al corner.

De esa ejecución nace la jugada del gol uruguayo. Luego de un rechazo defensivo, recupera Bentancur que genera una acción profunda con Nuñez por izquierda, envía centro pasado que Giménez logra conectar y estrellar en el horizontal y en el rebote, De Arrascaeta, más lúcido que toda la defensa peruana, anticipa cualquier intento defensivo y sorprende a Galesse con un tiro cruzado de abajo hacia arriba para poner el único grito de gol de la noche y a la postre el de la clasificación mundialista.

Fue un manto de tranquilidad, en el momento preciso.

Apagó a Perú, justo antes de ir al descanso. Lo venció en el tanteador y en la convicción de sus fuerzas, fue un directo al mentón.

De vuelta en el partido Federico Valverde sorprendió con un remate de unos 35 metros fuera del área. El disparo fue fuerte y muy bien dirigido para estrellarse en el travesaño pese a la estirada del arquero Pedro Gallese.

El resto fue Uruguay intentado de contragolpe sin descuidarse atrás y Perú buscando por todos lados. Cambios de los dos entrenadores.

Alonso abastece de volantes y defensas para cerrar el partido. Quiere preservar el resultado sabiendo que la victoria era mundial.

Sobre el final, en tiempo agregado, la polémica.

Un remate largo de Trauco que paralizó los corazones, Rochet que adelantado retrocedió y logró contener el balón fuera de la línea de gol aun cuando él estaba dentro del arco.

Reclamaron todos los peruanos, el banco de suplentes. Protestas ante el árbitro, y el jugador Callens luego del final entrevistado por la TV de Perú dijo que “los robaron” en alusión a la jugada.

El árbitro principal no sancionó el hipotético tanto a pesar de que por intercomunicador el segundo asistente le dijo que era gol, chequeado por sus compañeros del VAR ratificaron que no había traspasado el balón de manera completa la línea y por tanto no era gol.

La goleada que Brasil le propinó a Chile cerró los números de la clasificación directa al Mundial.

El cierre fue de fiesta. Con las luces apagadas y el estadio iluminado por las linternas de los móviles y la cohetería festejando una nueva participación en los mundiales masculinos de la FIFA.

URUGUAY 1 – PERÚ 0

Estadio Centenario

Público: 65.000 personas.

Árbitros: Anderson Daronco, Bruno Pires y Kleber Lucio Gil
Cuarto árbitro: Luiz Flavio de Oliveira

VAR: Wagner Reway (BRA). AVAR: Rodrigo Dalonso (todos de Brasil)
 

Uruguay: Sergio Rochet; Ronald Araújo, Diego Godín, José María Giménez, Mathías Olivera; Facundo Pellistri (83' Damián Suárez), Rodrigo Bentancur, Federico Valverde; Giorgian De Arrascaeta (83' Maximiliano Gómez); Darwin Núñez (66' Edinson Cavani) y Luis Suárez (75' Lucas Torreira). 

DT: Diego Alonso

Perú: Pedro Gallese; Luis Advíncula, Carlos Zambrano, Alexander Callens, Miguel Trauco; Renato Tapia, Yoshimar Yotún (60' Christopher Gonzales), Sergio Peña (45' Edison Flores); André Carrillo (64' Santiago Ormeño), Cristian Cueva (75' Horacio Calcaterra); Gianluca Lapadula (75' Alex Valera). 

DT: Ricardo Gareca.

Goles: 42' Giorgian De Arrascaeta (U)

Amarillas: 71' Facundo Pellistri (U), 75' Luis Suárez (U).

Ernesto Ortiz

CPDU